En el vagón de metro, entre el tumulto,
destaca un joven caballero
de gafas oscuras
y pelo negro engominado, -peinado hacia atrás-.
En sus manos:
una delicada rosa roja -de carnosos pétalos- custodiada por dos esforzados helechos,
y su inseparable bastón blanco.
Con cierto nerviosismo aguarda a que su estación llegue
para salir blandiendo una sonrisa
desplegada
con fervor,
rumbo a su cita ....
No hay comentarios:
Publicar un comentario